Los antiácidos son sustancias que actúan contra la acidez estomacal. La acidez se experimenta como una sensación de dolor o quemazón en el estómago o a lo largo del esófago. Por ejemplo: bicarbonato de sodio, omeprazol, sucralfato.
El estómago secreta naturalmente una serie de sustancias ácidas que permiten la digestión de los alimentos. Las paredes del estómago están preparadas para resistir estas sustancias; pero el esófago no lo está. Cuando los ácidos gástricos suben hacia el esófago se experimenta la sensación de ardor. Este fenómeno se llamada “reflujo gastroesofágico”.
Las causas de la acidez estomacal puede relacionarse con diversos factores:
- Consumo de bebidas carbonatadas (gaseosas)
- Consumo de bebidas muy especiadas
- Recostarse inmediatamente después de la comida
- Patologías previas del sistema digestivo como hernia de hiato o incompetencia parcial de esfínter gastroesofágico
- Consumo excesivo de comida
- Consumo de bebidas alcohólicas
El antiácido actúa contrarrestando la acidez estomacal, ya que es una sustancia alcalina (base).
Algunos antiácidos son citoprotectores o protectores de la mucosa gástrica, tanto de la acción de las enzimas digestivas como del ácido en sí mismo. Esto significa que no apuntan a aumentar el pH (disminuir la acidez) sino simplemente proteger las paredes del sistema digestivo de sus efectos adversos.
Otros antiácidos son inhibidores de la bomba de protones: reducen significativamente la producción de ácido en el estómago. Son bases (sustancias alcalinas) débiles. Bloquen la enzima ATPasa, también conocida como bomba de protones, que es directamente responsable de la secreción ácida.
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Ejemplos de antiácidos
- Bicarbonato de sodio. Compuesto cristalino soluble en agua.
- Hidróxido de magnesio. Preparación fluida de magnesio, también llamada “leche de magnesio”. También se utiliza como laxante.
- Carbonato de calcio. Es un compuesto químico muy abundante en la naturaleza, tanto en materia inorgánica, como las rocas, como en seres vivos (como moluscos y corales). En medicina, además de como antiácido, se utiliza como suplemento de calcio y agente adsorbente.
- Hidróxido de aluminio. Se enlaza con el exceso de ácido en el estómago, por lo que también se utiliza para el tratamiento de úlceras. Puede causar estreñimiento.
- Sucralfato (citoprotector). Se utiliza para contrarrestar los síntomas de la hiperacidez gástrica, pero también para las úlceras gástrica o duodenal. Es más eficaz cuando se toma antes de las comidas.
- Omeprazol (inhibidor de la bomba de protones). Inhibe hasta un 80% la secreción de ácido clorhídrico.
- Lansoprazol (inhibidor de la bomba de protones). Se utiliza para tratar y prevenir todo tipo de afecciones asociadas al ácido gástrico y el reflujo: lesiones, úlceras, etc.
- Esomeprazol (inhibidor de la bomba de protones). Si se administra diariamente durante cinco días disminuye en 90% la producción media de ácido.
- Pantoprazol (inhibidor de la bomba de protones). Se utiliza para tratamientos de ocho semanas.
- Rabeprazol (inhibidor de la bomba de protones). Se utiliza en tratamientos a corto plazo.
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