La integridad es la cualidad de unidad o totalidad. La integridad de una persona radica en la capacidad de comportarse según sus principios y valores, es decir que sus pensamientos, palabras y actos tienen un mismo sentido y una dirección. Por ejemplo: expresar las ideas con sinceridad y claridad.
La integridad refiere también a cualquier entidad (objeto u organismo) que se encuentre en su forma original. Algo íntegro posee todas sus partes intactas, es decir que está completo y no tiene fallas.
Desde la psicología, la integridad es una característica de la personalidad de una persona. Supone estabilidad y coherencia entre los ideales y las formas de actuar. Ser una persona íntegra implica el valor de vivir con rectitud, bondad y honradez, y hacer lo correcto en cada situación. Por ejemplo: un estudiante que pasa los exámenes sin hacer trampa.
La integridad también es un derecho humano básico. Describe las condiciones físicas, psíquicas y morales que les permiten a las personas vivir saludablemente en cada circunstancia. Por ejemplo: las personas privadas de su libertad deben poder estar comunicadas con sus familiares.
La integridad es un valor fundamental en la sociedad, porque promueve la construcción de comunidades libres de corrupción y con mayor nivel de bienestar social.
- Ver además: Respeto
Tipos de integridad
Se pueden diferenciar tres tipos integridad:
- Integridad física. Se refiere a la plenitud corporal de la persona, al cuidado del cuerpo y de sus funciones. Implica el derecho a la buena salud. Por ejemplo: recibir atención médica en caso de un accidente.
- Integridad psíquica. Se refiere al cuidado de la salud mental de la persona. Implica el derecho a no ser manipulado mentalmente y al cuidado del equilibrio emocional. Por ejemplo: evitar la exposición constante a situaciones de estrés.
- Integridad moral. Se refiere a la autonomía de una persona para mantener, desarrollar o cambiar sus valores. Implica actuar según los propios principios y deseos. Por ejemplo: establecer límites claros al relacionarse con otras personas.
Además, se pueden diferenciar otros tipos de integridad, según el ámbito en que se observe. Estos son:
- Integridad personal. Desde una mirada jurídica, la integridad personal incluye todos los aspectos que incumben al ser humano. Implica que se debe garantizar el cuidado físico, psíquico y moral de las personas.
- Integridad religiosa. Se refiere a las personas que siguen una fe y actúan según ese sistema de creencias. Implica conocer las normas y rituales de una religión y cumplirlas.
- Integridad de la información. Dentro de la seguridad informática, la integridad de la información es la protección de los datos que son almacenados en bases de datos. Implica una manipulación segura que impida su alteración o destrucción.
- Integridad laboral. Se refiere a los valores que guían una organización empresarial o un espacio de trabajo. Implica establecer criterios de responsabilidad, profesionalismo y honestidad entre los trabajadores y hacia los clientes.
¿Cómo es una persona íntegra?
Una persona íntegra es la que actúa con honestidad y de acuerdo con sus principios y valores. La integridad se relaciona con el autoconocimiento y la confianza en uno mismo, porque implica seguridad para tomar decisiones basadas en las propias ideas.
Las personas íntegras aplican el principio de coherencia, que es el equilibrio entre lo que se dice y lo que se hace. En la cotidianeidad, hay circunstancias que resultan contradictorias, pero no por ello anulan la integridad. Por ejemplo: una persona que es responsable y puntual, un día puede necesitar más tiempo para salir de su casa y llegar tarde a su trabajo.
Actuar con integridad implica responsabilizarse por las consecuencias de los propios actos, por lo que las personas íntegras son honradas y leales.
Mantener una actitud íntegra implica a veces resistir la presión social para cambiar de opinión y estar en sintonía con un grupo o con una mayoría. Por ejemplo: elegir tener una religión distinta a la de la familia de origen.
Ejemplos de integridad
- Un estudiante que se dedica a sus tareas con constancia.
- Una persona que cumple con los compromisos que toma.
- Una persona que, en clara superioridad física en relación con otra, no hace uso de su fuerza.
- Los líderes como Nelson Mandela, que se oponen a regímenes autoritarios por medio de la paz.
- Una directora que sanciona situaciones de abuso emocional en su ámbito laboral.
- Una persona que devuelve una billetera que encontró en la calle.
- Un periodista que no deja manipular sus opiniones.
- Personas que tienen cierto poder y eligen respetar y escuchar a las demás.
- Un político que mantiene sus propuestas e ideas luego de haber ganado una elección.
- Una persona que no actúa con sentimientos de rencor.
- Una persona que no evade sus obligaciones con el fisco.
- Una persona que mantiene hábitos de alimentación saludables.
- Una persona que aprende de sus errores y procura no repetirlos.
- Una persona que respeta a los animales.
- Una persona que tiene la posibilidad de sacar ventajas de otra y se abstiene de hacerlo.
- Una persona que es sincera en sus afirmaciones, aunque esto pueda generarle un conflicto.
- Los deportistas que se esfuerzan por conseguir su objetivo sin utilizar drogas para aumentar su rendimiento.
- Una institución religiosa que respeta los sentimientos y la fe de las personas.
- Un político que es capaz de rechazar un intento de soborno, e incluso de denunciarlo.
- Personas que cuando asumen una responsabilidad sienten que es imprescindible cumplirla.
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Referencias
- Afanador C., M. I. (2002). El derecho a la integridad personal. Elementos para su análisis. Convergencia. Revista de Ciencias Sociales, 9(30). https://www.redalyc.org/
- Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. (2016). Súper habilidades. Integridad. https://www.unodc.org/
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