La ironía y el sarcasmo son recursos literarios que buscan dar a entender exactamente lo contrario de lo que se está diciendo. El carácter irónico cumple una función cómica ya que se expresa en forma de ridículo, pero en ocasiones traspasa esa barrera y roza lo agresivo y lo ofensivo. Por ejemplo: Veo que estudiaste mucho… (a alguien que acaba de desaprobar un examen)
Tanto la ironía como el sarcasmo son herramientas que se pueden utilizar en la comunicación oral y escrita, requieren de un buen dominio del lenguaje y de ciertas competencias comunicativas que deberán ser compartidas por el emisor y el receptor.
- Ver además: Sátira
Sarcasmo e ironía, ¿son lo mismo?
En muchas ocasiones los conceptos de sarcasmo e ironía tienden a confundirse.
- Ironía. Es un recurso argumentativo y característico del lenguaje. Es frecuente que el lenguaje corporal y la entonación formen parte del discurso de una ironía, pues con esto se pone en evidencia que lo que se está diciendo en realidad no tiene el objetivo de hacer referencia a eso mismo sino a otra cosa.
- Sarcasmo. Es la utilización de la ironía como recurso para ofender o insultar a otra persona. Cuando se utiliza la ironía para denigrar u ofender a alguien, enmascarando el mensaje, se transforma en una especie de insulto denominado llama sarcasmo.
¿Cuándo se utiliza la ironía?
Existen algunos cómicos que utilizan el recurso de hablar en forma irónica, pero sin la mínima gesticulación que evidencia ello: cuando se sabe que se está ante un humorista, esto genera una forma especial de risa.
Hay un caso particular de ironía que también tiene que ver con el humor. En la cotidianeidad existen algunas situaciones en las que el resultado es opuesto al esperado, generando una especie de contradicción que como concepto es una situación algo cómica. La ironía es similar a la paradoja, pues la sensación es que nadie podría esperar que justo en esa situación sucediera eso.
Ejemplos de oraciones con ironía (humor)
- No estarás muy cansado, ¿no? (A alguien que se la ha pasado durmiendo)
- Nunca oí algo tan certero. (Cuando el otro ha dicho algo que no aporta nada)
- ¡Qué buena suerte que tengo! (Cuando las cosas vienen saliendo mal)
- La comida está muy fea. (Cuando está rica y se ha comido completamente)
- ¿Cómo la pasaste en el cumpleaños de la tía? (Cuando ha faltado a su promesa de ir al cumpleaños)
- Venía teniendo un mal día y me despidieron. Justo lo que necesitaba.
- Mi tarde fue realmente hermosa. (Cuando se la ha pasado llorando)
- ¿No estás cansado de trabajar? (Para alguien que hace tiempo no trabaja)
- La fiesta fue un éxito. (Cuando nadie ha asistido)
- Por suerte seguí tus consejos. (Cuando los ha seguido y todo salió mal)
Ejemplos de ironías (paradójicas)
- Una pared en la que está escrito: ‘Prohibido escribir en la pared’
- Una casa de arreglos que se jacta de poder arreglarlo todo, en donde no funciona el timbre.
- En el colegio, lengua es la materia que más le costaba. Esta semana publicó su tercer libro.
- Una persona que va en auto al gimnasio, para allí hacer bicicleta fija.
- Una camioneta de la oficina de tránsito, parada sobre un lugar en el que está prohibido detenerse.
- El barco más inmenso y más seguro del mundo acabó por hundirse.
- El presidente dijo que no descansaría hasta alcanzar la paz. Desde que asumió, con ese objetivo declaró varias guerras.
- El departamento de bomberos se ha incendiado.
- El hijo de un policía está acusado por robar un departamento.
- Quien era el más callado se convirtió en un reconocido locutor.
Ejemplos de sarcasmos
- La verdad que eres un genio. (A alguien que dio una idea poco brillante)
- Eres una chica muy bonita, y hoy estás especialmente bella. (A una que no es linda y está desarreglada)
- Había olvidado que tú eras el más inteligente, y que todos los demás éramos unos tontos.
- ¡Habla más fuerte, que no te escucho! (A alguien que está hablando muy fuerte)
- ¡Que atento eres! (A alguien que no se preocupa por los demás)
- Haz lo que tú quieras, no te preocupes por mí. (Expresando que debería preocuparse más)
- Me gusta su perfume, ¿cuánto tiempo ha pasado sumergido en él? (A alguien que tiene un perfume exagerado)
- No hables tan fuerte que quizás me aturdes. (A alguien que está hablando muy despacio)
- Señora, no sé si notó que tiene un poco de maquillaje en su cara. (A alguien que tiene un maquillaje muy notorio).
- Gracias, no esperaba menos de ti. (Cuando le ha provocado algún perjuicio)
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