La palabra “quemar” es un verbo transitivo de la primera conjugación que significa destruir o dañar algo o a alguien con fuego o por la acción de una fuente de energía. Por ejemplo: Quemé el asa de la olla.
Como verbo transitivo, “quemar” precisa la presencia de un objeto directo que complemente la acción que se describe.
Tiene otras acepciones como:
- Calentar mucho un alimento. Por ejemplo: Sopla el arroz que quema.
- Secar una planta por calor o frío excesivo. Por ejemplo: El frío ha quemado el ficus.
- Causar sensación de ardor al ingerir una cosa caliente o picante. Por ejemplo: Tragó el pimiento y se quemó la garganta.
- Derrochar algo valioso. Por ejemplo: Entre los hermanos quemaron la fortuna de su padre.
- Impacientar. Por ejemplo: La espera me está quemando.
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Oraciones con la palabra «quemar»
- Por más que lo intente, Ana no puede no quemar la comida.
- ¡Quememos pronto el documento antes de que llegue a manos de las autoridades!
- Ana y Paula se quemaron de tanto tomar sol en la terraza.
- Tomó un sorbo de sopa y se quemó el estómago de lo caliente que estaba.
- La nieve quemó los frutos del campo.
- Preciso quemar calorías así que voy a salir a correr.
- Detuvieron al sospechoso que había quemado la casa de aquella familia.
- ¡Cuídense del sol que les va a quemar la piel!
- En aquel viaje, quemamos todos nuestros ahorros.
- Los cocineros suelen quemarse mucho los brazos.
- Aunque no lo creas, mi abuela me contó que antes se quemaba la basura en los incineradores de los edificios.
- En otoño se suelen quemar las hojas secas.
- Una vez me quemé con aceite hirviendo y me dolió muchísimo.
- Ese político se ha quemado de tantos discursos que dio.
- Es peligroso tomar sol sin protección porque, más allá de quemarnos, puede ocasionar también cáncer de piel.
- El auto se quemó hasta explotar por completo.
- Quemar basura genera un humo con gran cantidad de sustancias químicas dañinas para la salud y el medio ambiente.
- Se quemaron los pastizales de aquella provincia.
- El fuego seguía quemando las sierras de aquella ciudad austral.
- Para conseguir un sabor ahumado, quemar las berenjenas directo sobre la hornalla.
- El físico debía tener cuidado de no quemarse con esos líquidos.
- Como parte del ritual, quemaban inciensos y sahumerios.
- Leí en el diario que un grupo de personas quemó varios contenedores de basura a modo de protesta.
- ¡No puedo creer que mi novio me haya quemado!
- Tenía tanta hambre que comió sin chistar la comida a pesar de estar quemada.
- La arena les quemaba los pies, por eso corrieron al mar.
- El cloro de la pileta me quemó el traje de baño.
- El asiento del coche nos quemaba la piel de las piernas.
- Este seguro cubría los electrodomésticos que se quemaran por baja de tensión.
- En la clase de química, un alumno se quemó realizando el experimento del huevo entrando en la botella.
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