Los animales artrópodos son animales invertebrados que tienen un cuerpo conformado por un exoesqueleto (que recibe el nombre de cutícula), apéndices articulados y segmentos repetitivos. Los animales artrópodos pueden ser: arácnidos, insectos, crustáceos y miriápodos. Por ejemplo: la araña, la mosca, el cangrejo y el ciempiés.
Existen más de un millón de especies de animales artrópodos, por lo que este filo es considerado el más numeroso del reino animal. Las diferentes especies habitan en ecosistemas terrestres, acuáticos y aéreos.
Arácnidos. Son animales artrópodos que tienen cuatro pares de patas, dos tagmas y no tienen alas ni antenas. La mayoría de los arácnidos se alimenta de insectos, son ovíparos y están presentes en todos los climas y regiones del mundo. Por ejemplo: arañas, como la araña cangrejo, escorpiones, como el escorpión de cola gorda y ácaros, como la garrapata.
Insectos. Son animales artrópodos que tienen tres pares de patas, dos pares de alas y antenas. Se caracterizan por ser el tipo de animal más abundante y diverso del planeta, habitan en todo tipo de clima y en ecosistemas terrestres, de agua y aéreos. Según el caso, se alimentan de vegetales, madera, heces y algunos parasitan a otros organismos. Por ejemplo: los lepidópteros, como la mariposa, los dípteros, como la mosca y los himenópteros, como la hormiga.
Crustáceos. Son animales artrópodos que tienen dos pares de antenas y muchos tienen el tórax protegido en un caparazón. Suelen ser animales que habitan en el mar, aunque algunos son de agua dulce y unos pocos habitan en ecosistemas terrestres. Existen crustáceos de distintos tamaños que se alimentan de animales muertos, algas, otros crustáceos, caracoles, huevos, entre otros. Por ejemplo: el cangrejo, el camarón, la pulga de agua y la langosta.
Miriápodos. Son animales artrópodos que tienen varios pares (incluso cientos) de patas. Se caracterizan por tener un tronco largo dividido en segmentos anillados, antenas y suelen ser confundidos con los insectos. Existen muchas especies de miriápodos y todas habitan en ecosistemas terrestres (sobre todo, en ambientes húmedos). La mayoría se alimenta de plantas o de otros organismos en proceso de descomposición. Por ejemplo: el ciempiés, la scolopendra y los diplópodos.
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