Hato es un sustantivo que designa varias cosas, por ejemplo, un conjunto formado por ropa y otros objetos que está en un envoltorio o un rebaño (El viajero llevaba su hato a todas partes). Ato es una conjugación del verbo “atar”, que designa el acto de unir con nudos (Siempre ato mis zapatillas muy fuerte).
Estas dos palabras son homófonas, es decir, tienen el mismo sonido, pero su significado y escritura son diferentes. Por ejemplo: Siempre ato mi hato con doble nudo.
- Ver además: Haciendo o asciendo
¿Cuándo se usa cada una?
- Hato. Es un sustantivo masculino que hace referencia a un conjunto formado por ropa y otros objetos, a un rebaño, a un grupo de individuos u objetos o a un sitio en el que los pastores descansan mientras están con el ganado. Por ejemplo: Cuando llegué al cumpleaños, había un hato de personas.
- Ato. Es el verbo “atar” conjugado en primera persona singular (yo) del presente del indicativo o en segunda formal (usted) o tercera (ella, él) de pretérito perfecto simple. En el último caso, lleva tilde en la O: ató. Este verbo hace referencia a unir o sujetar algo con nudos, relacionar dos elementos o no permitir movimientos o acciones. Por ejemplo: El detective ató los cabos sueltos y descubrió cómo se había producido el robo.
- Ver también: Hierva, hierba o yerba
Oraciones con “hato”
- El pastor llevó el hato hasta la pastura.
- Después de que el campesino llegó al hato, almorzó el sánguche que se había preparado a la mañana.
- Cuando la cantante está de gira, siempre lleva un hato con una muda de ropa y elementos de higiene.
- En esa tienda hay un hato de antigüedades.
- Llegaron al hato con mucha sed, pero, por suerte, había un aljibe con agua potable.
- Juan siempre llevaba fósforos en el hato, para prender una fogata en caso de que fuese necesario.
- Nadie confiaba en ellos, porque eran un hato de malhechores.
- El comerciante llevaba abrigo en su hato.
- La pintora hizo un cuadro de un hato que pastorea en el campo.
- El médico del pueblo lleva un hato con distintos medicamentos.
- Ni bien el pastor llegó al hato, se acostó sobre una manta para dormir un poco.
- El automóvil no podía avanzar, porque había un hato que estaba cruzando la carretera.
- En el hato había una casa en la que los campesinos podían descansar o prepararse comida.
- El caballero hizo un hato con sus herramientas y ropa y se marchó del castillo.
- En mi casa hay un mueble con un hato de cosas que casi no utilizamos.
Oraciones con “ato”
- María ató el cabo del barco al muelle, para que pudieran descender los pasajeros del velero.
- Siempre ato las bolsas con un nudo suave, para poder desatarlas después sin mucho esfuerzo.
- Siempre que hago deporte me ato el pelo para estar más cómoda.
- Si me ato a un compromiso, es porque sé que lo voy a poder cumplir.
- El alpinista ató una cuerda a su arnés para descender de la montaña.
- Sergio ató los cabos sueltos y se dio cuenta de que estaba siendo engañado.
- Con sus palabras ató a los ciudadanos a cumplir con sus obligaciones.
- Siempre que salgo a pasear con mi perro lo ato con la correa para que no se escape.
- Siempre que cuelgo las sábanas mojadas en la terraza, les ato las puntas para que no se vuelen.
- El trabajo lo ató a muchos compromisos que no podía dejar de cumplir.
- Cuando dejo de tejer, ato la lana del tejido para que no se desarme.
- El peluquero le ató el pelo con hebillas invisibles para que el peinado quedara bien sujetado.
- El carpintero ató las maderas para ponerlas en su camión.
- La compañía disquera ató a la banda para que no pudieran divulgar sus canciones hasta que se publicara el disco.
- El montañista ató la cantimplora a su cinturón para tenerla a mano en todo momento.
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